Comprendí que en cualquier circunstancia
Yo estaba en el lugar correcto…
En la hora correcta…
En el momento exacto… Entonces me relajé.
Hoy sé que eso tiene nombre: AUTOESTIMA
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Me di cuenta de que mi angustia y sufrimientos emocionales no pasan de ser una señal de que voy en contra de mis verdades.
Hoy sé que eso es: AUTENTICIDAD
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Dejé de desear que mi vida fuese distinta
y comencé a ver que todo lo que sucede contribuye a mi crecimiento.
Hoy a eso le llamo: MADUREZ
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Comencé a entender cómo es ofensivo forzar
alguna situación o a alguien para realizar mis deseos
aún sabiendo que no es el momento
o que la persona no está preparada, inclusive yo misma
Hoy sé que el nombre de esto es: RESPETO
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Comencé a despojarme de todo lo que no fuera saludable:
personas, tareas, todo y cualquier cosa que me desanimara.
En principio, mi razón me llamó la atención acerca de esa
actitud de egoísmo.
Hoy sé que se llama: AMOR PROPIO
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Dejé de temerle a mi tiempo libre
y de hacer grandes planes. Abandoné proyectos a muy largo plazo.
Hoy hago lo que considero correcto, lo que me gusta, cuando quiero
y a mi propio ritmo.
Hoy sé que eso es: SIMPLICIDAD
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Desistí de querer tener siempre la razón
y con eso cometí menos errores.
Hoy descubrí la... HUMILDAD
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Dejé de revivir el pasado y de preocuparme por el futuro.
Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida realmente ocurre.
Hoy vivo un día a la vez Eso es: PLENITUD
• CUANDO ME AMÉ DE VERDAD…
Entendí que mi mente puede perturbarme y decepcionarme.
Pero, cuando la coloco al servicio del corazón, se torna una enorme y valiosa aliada.
Todo eso es: SABER VIVIR
Kim y Alison McMillen
Colaboración de Clor. Luis Vagellas
domingo, 17 de julio de 2011
martes, 7 de junio de 2011
El corcho mágico
El Supervisor visitó una escuela primaria.
En su recorrida observó algo que le llamó la atención: una maestra estaba atrincherada atrás de su escritorio, los alumnos hacían un gran desorden; el cuadro era caótico.
Decidió presentarse: "Permiso, soy el Supervisor... ¿Algún problema?"
"Estoy abrumada señor, no sé qué hacer con estos chicos...
No tengo láminas, no tengo libros, el ministerio no me manda material didáctico, no tengo recursos electrónicos, no tengo nada nuevo que mostrarles ni qué decirles..."
El inspector que era un "Docente de Alma", vio un corcho en el desordenado escritorio, lo tomó y con aplomo se dirigió a los chicos:
Qué es esto? “Un corcho señor", gritaron los alumnos sorprendidos.
"Bien, de dónde sale el corcho?".
"De la botella señor. Lo coloca una máquina..., del alcornoque... de un árbol... de la madera...", respondían animosos los niños.
"Y qué se puede hacer con madera?", continuaba entusiasta el docente.
"Sillas...", "una mesa...", "un barco!".
Bien, tenemos un barco.
Quién lo dibuja? Quién hace un mapa en el pizarrón y coloca el puerto más cercano para nuestro barquito?
Escriban a qué provincia argentina pertenece.
Y cuál es el otro puerto más cercano?
A qué país corresponde? Qué poeta conocen que allí nació? Qué produce esta región? Alguien recuerda una canción de este lugar?
Y comenzó una tarea de geografía, de historia, de música, economía, literatura, religión, etc.
La maestra quedó impresionada. Al terminar la clase le dijo conmovida:
"Señor nunca olvidaré lo que me enseñó hoy. Muchas Gracias."
Pasó el tiempo. El inspector volvió a la escuela y buscó a la maestra.
Estaba acurrucada atrás de su escritorio, los alumnos otra vez en total desorden...
"Señorita... ¿Qué pasó? ¿No se acuerda de mí?”
“Sí señor, cómo olvidarme!
Qué suerte que regresó.
No encuentro el corcho.
Dónde lo dejó?".
Enrique Mariscal
En su recorrida observó algo que le llamó la atención: una maestra estaba atrincherada atrás de su escritorio, los alumnos hacían un gran desorden; el cuadro era caótico.
Decidió presentarse: "Permiso, soy el Supervisor... ¿Algún problema?"
"Estoy abrumada señor, no sé qué hacer con estos chicos...
No tengo láminas, no tengo libros, el ministerio no me manda material didáctico, no tengo recursos electrónicos, no tengo nada nuevo que mostrarles ni qué decirles..."
El inspector que era un "Docente de Alma", vio un corcho en el desordenado escritorio, lo tomó y con aplomo se dirigió a los chicos:
Qué es esto? “Un corcho señor", gritaron los alumnos sorprendidos.
"Bien, de dónde sale el corcho?".
"De la botella señor. Lo coloca una máquina..., del alcornoque... de un árbol... de la madera...", respondían animosos los niños.
"Y qué se puede hacer con madera?", continuaba entusiasta el docente.
"Sillas...", "una mesa...", "un barco!".
Bien, tenemos un barco.
Quién lo dibuja? Quién hace un mapa en el pizarrón y coloca el puerto más cercano para nuestro barquito?
Escriban a qué provincia argentina pertenece.
Y cuál es el otro puerto más cercano?
A qué país corresponde? Qué poeta conocen que allí nació? Qué produce esta región? Alguien recuerda una canción de este lugar?
Y comenzó una tarea de geografía, de historia, de música, economía, literatura, religión, etc.
La maestra quedó impresionada. Al terminar la clase le dijo conmovida:
"Señor nunca olvidaré lo que me enseñó hoy. Muchas Gracias."
Pasó el tiempo. El inspector volvió a la escuela y buscó a la maestra.
Estaba acurrucada atrás de su escritorio, los alumnos otra vez en total desorden...
"Señorita... ¿Qué pasó? ¿No se acuerda de mí?”
“Sí señor, cómo olvidarme!
Qué suerte que regresó.
No encuentro el corcho.
Dónde lo dejó?".
Enrique Mariscal
domingo, 29 de mayo de 2011
Buena gente
En el medio de las piedras puede aparecer
una espiga nueva, y te alimenta.
Y un hilito de agua fresca del amanecer
puede componer tu fe sedienta.
Una luz amiga siempre, siempre brillará,
en el medio de esta cruel oscuridad.
Buena gente que se anima,
a enfrentar con una flor miles de espinas.
Buena gente en cada esquina,
mucho más de lo que creen,
los que quieren verte en ruinas.
Buena gente que se arrima
al que llora, al que tropieza y se lastima.
Buena gente que camina
a su modo y a su suerte,
hacia el frente de la vida.
Buena gente…
En el medio del naufragio puede aparecer
flotando una tabla salvadora.
Como apareció esa mano que me diste ayer.
Como yo te doy mi mano ahora.
Una voz amiga, siempre, siempre escucharás,
que te alienta, que te ayuda a no aflojar.
Buena gente que se anima,
a enfrentar con una flor miles de espinas.
Buena gente en cada esquina.
Mucha más de lo que creen
los que quieren verte en ruinas.
Buena gente que se arrima
al que llora, al que tropieza y se lastima.
Buena gente que camina
a su modo y a su suerte
hacia el frente de la vida.
Buena gente…
Ignacio Copani
una espiga nueva, y te alimenta.
Y un hilito de agua fresca del amanecer
puede componer tu fe sedienta.
Una luz amiga siempre, siempre brillará,
en el medio de esta cruel oscuridad.
Buena gente que se anima,
a enfrentar con una flor miles de espinas.
Buena gente en cada esquina,
mucho más de lo que creen,
los que quieren verte en ruinas.
Buena gente que se arrima
al que llora, al que tropieza y se lastima.
Buena gente que camina
a su modo y a su suerte,
hacia el frente de la vida.
Buena gente…
En el medio del naufragio puede aparecer
flotando una tabla salvadora.
Como apareció esa mano que me diste ayer.
Como yo te doy mi mano ahora.
Una voz amiga, siempre, siempre escucharás,
que te alienta, que te ayuda a no aflojar.
Buena gente que se anima,
a enfrentar con una flor miles de espinas.
Buena gente en cada esquina.
Mucha más de lo que creen
los que quieren verte en ruinas.
Buena gente que se arrima
al que llora, al que tropieza y se lastima.
Buena gente que camina
a su modo y a su suerte
hacia el frente de la vida.
Buena gente…
Ignacio Copani
sábado, 28 de mayo de 2011
La invitación de Oriah, anciano indio
No me interesa lo que haces para ganarte la vida.
Quiero saber cuál es tu dolor, y si te atreves a soñar que te permites encontrar lo que tu corazón añora.
No me interesa cuantos años tienes.
Quiero saber si te arriesgarías a parecer un tonto por amor, por tus sueños o por la aventura de estar vivo.
No me interesan qué planetas hacen la cuadratura de tu luna.
Quiero saber si has tocado el centro de tu propio dolor, si las traiciones de la vida te han abierto o si te has encogido y cerrado por el temor a sentir más dolor!
Quiero saber si puedes sentarte con el dolor, mío o tuyo, sin moverte para esconderlo o para resolverlo.
Quiero saber si puedes estar con el gozo, tuyo o mío; si puedes danzar, salvajemente y dejar que el Éxtasis te llene hasta las yemas de los dedos de las manos y de los pies, sin advertirnos que debemos tener cuidado y ser realistas, ni recordarnos las limitaciones de ser humanos.
No me interesa si es verdadera la historia que me cuentas.
Quiero saber si puedes desilusionar a otra persona para ser auténtico contigo mismo; si puedes soportar la acusación de ser un traidor y no traicionar tu alma.
Quiero saber si puedes ser fiel y por lo tanto confiable.
Quiero saber si puedes sentir la belleza aún cuando no todos los días son bellos, y si puedes encontrar la fuente de tu vida en SU presencia.
Quiero saber si puedes vivir con el fracaso, tuyo o mío, y a pesar de ello pararte a la orilla de un lago y gritar "SI!" al plateado de la luna llena.
No me interesa saber donde vives ni cuanto dinero tienes.
Quiero saber si puedes ponerte de pie, después de una noche de dolor y desesperanza, agotado y golpeado hasta los huesos, y hacer lo que hay que hacer por los niños.
No me interesa quién eres, ni cómo llegaste aquí.
Quiero saber si permanecerías conmigo en el centro del fuego sin echarte para atrás.
No me interesa donde has estudiado, ni que has estudiado, ni con quién lo has hecho.
Quiero saber qué es lo que te sostiene desde adentro cuando todo lo demás falla.
Quiero saber si puedes estar solo contigo mismo y si te agrada verdaderamente la compañía que buscas en los momentos vacíos.
Oriah. Soñador de la montaña. Anciano Indio.
Gentileza de Clr. Graciela Padula
Quiero saber cuál es tu dolor, y si te atreves a soñar que te permites encontrar lo que tu corazón añora.
No me interesa cuantos años tienes.
Quiero saber si te arriesgarías a parecer un tonto por amor, por tus sueños o por la aventura de estar vivo.
No me interesan qué planetas hacen la cuadratura de tu luna.
Quiero saber si has tocado el centro de tu propio dolor, si las traiciones de la vida te han abierto o si te has encogido y cerrado por el temor a sentir más dolor!
Quiero saber si puedes sentarte con el dolor, mío o tuyo, sin moverte para esconderlo o para resolverlo.
Quiero saber si puedes estar con el gozo, tuyo o mío; si puedes danzar, salvajemente y dejar que el Éxtasis te llene hasta las yemas de los dedos de las manos y de los pies, sin advertirnos que debemos tener cuidado y ser realistas, ni recordarnos las limitaciones de ser humanos.
No me interesa si es verdadera la historia que me cuentas.
Quiero saber si puedes desilusionar a otra persona para ser auténtico contigo mismo; si puedes soportar la acusación de ser un traidor y no traicionar tu alma.
Quiero saber si puedes ser fiel y por lo tanto confiable.
Quiero saber si puedes sentir la belleza aún cuando no todos los días son bellos, y si puedes encontrar la fuente de tu vida en SU presencia.
Quiero saber si puedes vivir con el fracaso, tuyo o mío, y a pesar de ello pararte a la orilla de un lago y gritar "SI!" al plateado de la luna llena.
No me interesa saber donde vives ni cuanto dinero tienes.
Quiero saber si puedes ponerte de pie, después de una noche de dolor y desesperanza, agotado y golpeado hasta los huesos, y hacer lo que hay que hacer por los niños.
No me interesa quién eres, ni cómo llegaste aquí.
Quiero saber si permanecerías conmigo en el centro del fuego sin echarte para atrás.
No me interesa donde has estudiado, ni que has estudiado, ni con quién lo has hecho.
Quiero saber qué es lo que te sostiene desde adentro cuando todo lo demás falla.
Quiero saber si puedes estar solo contigo mismo y si te agrada verdaderamente la compañía que buscas en los momentos vacíos.
Oriah. Soñador de la montaña. Anciano Indio.
Gentileza de Clr. Graciela Padula
domingo, 15 de mayo de 2011
La difícil facilidad del verbo oir
Uno de los mayores problemas de la comunicación, tanto la de masas como la interpersonal, es cómo el receptor (o sea el otro), oye lo que el emisor (o sea una, la persona), ha hablado.
Son pocas las personas que procuran oir exactamente lo que la otra está diciendo.
Observamos que, en general:
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que el otro no está diciendo.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que quiere oir.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que ya escuchó antes, y coloca lo que el otro está hablando en aquello que se acostumbró a oir.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que imagina que el otro iba a hablar.
* En una discusión, en general, los discutidores no oyen lo que el otro está hablando. Oyen apenas lo que están pensando para decirlo enseguida.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que le gustaría oir que el otro dijese.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye apenas lo que está sintiendo.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye lo que ya pensaba respecto de aquello que la otra está hablando.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Retira del habla de la otra, apenas las partes que tengan que ver con ella y la emocionen, agraden o molesten.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Oye lo que confirma o rechace su propio pensamiento. Vale decir, transforma lo que el otro está hablando en objeto de concordancia o discordancia.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Oye lo que pueda adaptarse al impulso de amor, rabia u odio que ya sentía por la otra.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye del habla de ella apenas aquellos puntos que puedan tener sentido para las ideas y puntos de vista que en el momento la estén influenciando o tocando más directamente.
Monólogos simultáneos canjeados a guisa de conversación...
Monólogos paralelos a guisa de diálogo...
Hasta puede haber diálogo, sin que necesariamente exista comunicación.
Qué raro y difícil es comunicarse!
Oir implica una entrega al otro. Es un gran desafío. Oir es proeza, es rareza. Oir es un acto de sabiduría.
Artur Da Tavola
Son pocas las personas que procuran oir exactamente lo que la otra está diciendo.
Observamos que, en general:
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que el otro no está diciendo.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que quiere oir.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que ya escuchó antes, y coloca lo que el otro está hablando en aquello que se acostumbró a oir.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que imagina que el otro iba a hablar.
* En una discusión, en general, los discutidores no oyen lo que el otro está hablando. Oyen apenas lo que están pensando para decirlo enseguida.
* El receptor no oye lo que el otro habla. Oye lo que le gustaría oir que el otro dijese.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye apenas lo que está sintiendo.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye lo que ya pensaba respecto de aquello que la otra está hablando.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Retira del habla de la otra, apenas las partes que tengan que ver con ella y la emocionen, agraden o molesten.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Oye lo que confirma o rechace su propio pensamiento. Vale decir, transforma lo que el otro está hablando en objeto de concordancia o discordancia.
* Una persona no oye lo que la otra está hablando. Oye lo que pueda adaptarse al impulso de amor, rabia u odio que ya sentía por la otra.
* Una persona no oye lo que la otra habla. Oye del habla de ella apenas aquellos puntos que puedan tener sentido para las ideas y puntos de vista que en el momento la estén influenciando o tocando más directamente.
Monólogos simultáneos canjeados a guisa de conversación...
Monólogos paralelos a guisa de diálogo...
Hasta puede haber diálogo, sin que necesariamente exista comunicación.
Qué raro y difícil es comunicarse!
Oir implica una entrega al otro. Es un gran desafío. Oir es proeza, es rareza. Oir es un acto de sabiduría.
Artur Da Tavola
domingo, 8 de mayo de 2011
No es No.
Y hay una sola manera de decirlo. No.
Sin admiración, ni interrogantes, ni puntos suspensivos.
No, se dice de una sola manera.
Es corto, rápido, monocorde, sobrio y escueto. No.
Se dice una sola vez. No.
Con la misma entonación. No.
Como un disco rayado. No.
Un no que necesita explicaciones y justificaciones, no es No.
No, tiene la brevedad de un segundo.
Es un No para el otro, porque ya fue para uno mismo.
No es No aquí, y muy lejos de aquí.
No, no deja las puertas abiertas ni entrampa con esperanzas.
Ni puede dejar de ser No, aunque el otro y el mundo
se pongan patas para arriba.
No, es el último acto de dignidad.
No, es el fin de un libro, sin más capítulos ni segundas partes.
No, no se dice por carta, ni se dice con silencios,
ni en voz baja, ni gritando, ni con la cabeza gacha,
ni mirando hacia otro lado, ni con símbolos devueltos;
ni con pena y menos aún con satisfacción.
No, es No, porque No.
Cuando el No es No, se mira a los ojos,
y el No se descuelga naturalmente de los labios.
La voz del No no es trémula, ni vacilante, ni agresiva,
y no deja duda alguna.
Ese No, no es una negación del pasado;
es una corrección del futuro.
Y sólo quien sabe decir No... puede decir Sí.
Hugo Finkelstein
Y hay una sola manera de decirlo. No.
Sin admiración, ni interrogantes, ni puntos suspensivos.
No, se dice de una sola manera.
Es corto, rápido, monocorde, sobrio y escueto. No.
Se dice una sola vez. No.
Con la misma entonación. No.
Como un disco rayado. No.
Un no que necesita explicaciones y justificaciones, no es No.
No, tiene la brevedad de un segundo.
Es un No para el otro, porque ya fue para uno mismo.
No es No aquí, y muy lejos de aquí.
No, no deja las puertas abiertas ni entrampa con esperanzas.
Ni puede dejar de ser No, aunque el otro y el mundo
se pongan patas para arriba.
No, es el último acto de dignidad.
No, es el fin de un libro, sin más capítulos ni segundas partes.
No, no se dice por carta, ni se dice con silencios,
ni en voz baja, ni gritando, ni con la cabeza gacha,
ni mirando hacia otro lado, ni con símbolos devueltos;
ni con pena y menos aún con satisfacción.
No, es No, porque No.
Cuando el No es No, se mira a los ojos,
y el No se descuelga naturalmente de los labios.
La voz del No no es trémula, ni vacilante, ni agresiva,
y no deja duda alguna.
Ese No, no es una negación del pasado;
es una corrección del futuro.
Y sólo quien sabe decir No... puede decir Sí.
Hugo Finkelstein
sábado, 7 de mayo de 2011
Experienciando
"La enfermedad es vivir en la rutina, con valores ajenos, sin haber estado nunca en contacto con la vida que fluye dentro de cada uno, sin haber sentido la complejidad de las propias experiencias, de donde surgen las alternativas." (1973)
Eugene T. Gendlin
Eugene T. Gendlin
domingo, 1 de mayo de 2011
La música: tratamiento para mejorar la salud
Siempre que se escucha música se libera una sustancia química en el cerebro, la dopamina, responsable de proporcionar una sensación bienestar
Una reciente investigación renueva la idea de que la música puede se una herramienta muy útil para una gran variedad de tratamientos. Escuchar la que a uno más le gusta produce bienestar, porque el organismo libera más cantidades de un neurotransmisor relacionado con los sistemas de recompensa, la dopamina. De hecho, otros trabajos ya la habían relacionado con una mejor salud cardiovascular, el alivio del dolor crónico y la mejora de las habilidades lingüísticas y cognitivas. La esfera musical, por tanto, sólo aporta beneficios.
La dopamina actúa a través de muchas funciones: influye en el comportamiento y la cognición, la actividad motora, la motivación y la recompensa, la regulación de la producción de leche, el sueño, la atención y el aprendizaje (sus niveles aumentan en respuesta a estímulos o actividades de recompensa como la comida, las relaciones sexuales u obtener dinero). Y, ahora, tras los resultados de la investigación canadiense, también está relacionada con el humor y el bienestar.
Ventajas para la salud
Este trabajo da garantías a otros hallazgos pasados, entre los que está uno realizado en la Universidad de Maryland (EE.UU.) que afirma que escuchar la música que más alegra favorece una buena salud cardiovascular: cuando los voluntarios de este estudio escuchaban la que les complacía, sus venas y arterias se dilataban un 26%, lo que en términos médicos se considera una respuesta muy saludable. Si bien los expertos insisten que no puede considerarse como tratamiento para enfermedades de este tipo, sí que indican que puede constituir otra estrategia preventiva fácilmente incorporable en las costumbres cotidianas.
Los mismos investigadores explicaban en otro estudio parecido que escuchar 30 minutos diarios no solo sirve como relajante mental, sino que tiene otros beneficios que se extienden al resto del organismo. La clave no está tanto en el tipo de música, sino en el volumen, el ritmo y en el hecho de que sea la preferida del oyente. Aunque los efectos en la corriente sanguínea duran unos segundos, la acumulación de beneficios perdura y son muy positivos en todas las edades.
Como terapia
Pero la música no sólo interviene en el bienestar del organismo. También desarrolla la capacidad de atención y favorece la imaginación y la capacidad creadora, estimula la habilidad de concentración y la memoria a corto y largo plazo, y desarrolla el sentido del orden y el análisis, facilita el aprendizaje y ejercita la inteligencia.
Las mismas áreas del cerebro implicadas en la percepción musical intervienen también en el lenguaje y en tareas de lectura. De la misma manera, la instrucción musical, según los científicos, induce una mayor sensibilidad a las emociones.
La música como terapia se utiliza en el tratamiento de dolencias como la hipertensión arterial, estados de ansiedad, depresión y estrés, y alteraciones del sueño. También se emplea en la rehabilitación de trastornos psicóticos, autismo y de adolescentes con trastornos del comportamiento. Como su escucha interviene en la producción o inhibición de neurotransmisores en el organismo, a través de ella, se intenta provocar reacciones químicas que mejoren, aceleren o favorezcan el aprendizaje.
Desde el nacimiento
Educar en la música desde la niñez es importante para que los más pequeños puedan sacar provecho de todos sus beneficios fisiológicos y psicológicos. No solo desarrollarán su sensibilidad estética, sino también su emotividad. Lo cierto es que hay una relación directa entre lo que uno escucha y cómo piensa o actúa. También es importante cómo se escucha la música, es decir, un volumen más o menos alto, el ritmo o la velocidad, las intensidades, la cantidad de tiempo, el contenido de las letras de las canciones o el tipo de baile asociado a cada canción.
Todos estos elementos constituyen diversas formas y hábitos sociales que influirán en la manera de ser del niño e, incluso, en su manera de vestir. No obstante, es recomendable hacer un buen uso de todos los elementos. Respecto al volumen, por ejemplo, cuando es demasiado alto puede provocar falta de concentración, alteración el sistema nervioso y alteración de la salud del oído.
Según un método oficial estadounidense, el método Tomatis, la educación musical y del oído puede iniciarse en el útero materno. Alfred Tomatis era un otorrinolaringólogo francés que reveló a mediados del siglo pasado que el embrión codifica las vibraciones. Este descubrimiento fue el inicio la audiopsicofonología. Según esta teoría, es aconsejable que las embarazadas canten (aunque desafinen), porque la voz, vía columna vertebral y filtración por parte del líquido amniótico, llega al embrión. Éste escucha y percibe el sonido a través de un "preoído" que se desarrolla a partir de las tres semanas de gestación.
La música, por tanto, puede activar la escucha ya en el embrión, fundamental para todas las etapas de la vida, según Tomatis. Tan importante es la escucha que si no funciona el sentido del oído se pueden producir graves problemas de aprendizaje y del habla. En resumen, bienestar y salud desde, incluso, antes del nacimiento.
Fuente: NÚRIA LLAVINA RUBIO
http://www.consumer.es/web/es/salud/psicologia/2011/01/24/198449.php
Una reciente investigación renueva la idea de que la música puede se una herramienta muy útil para una gran variedad de tratamientos. Escuchar la que a uno más le gusta produce bienestar, porque el organismo libera más cantidades de un neurotransmisor relacionado con los sistemas de recompensa, la dopamina. De hecho, otros trabajos ya la habían relacionado con una mejor salud cardiovascular, el alivio del dolor crónico y la mejora de las habilidades lingüísticas y cognitivas. La esfera musical, por tanto, sólo aporta beneficios.
La dopamina actúa a través de muchas funciones: influye en el comportamiento y la cognición, la actividad motora, la motivación y la recompensa, la regulación de la producción de leche, el sueño, la atención y el aprendizaje (sus niveles aumentan en respuesta a estímulos o actividades de recompensa como la comida, las relaciones sexuales u obtener dinero). Y, ahora, tras los resultados de la investigación canadiense, también está relacionada con el humor y el bienestar.
Ventajas para la salud
Este trabajo da garantías a otros hallazgos pasados, entre los que está uno realizado en la Universidad de Maryland (EE.UU.) que afirma que escuchar la música que más alegra favorece una buena salud cardiovascular: cuando los voluntarios de este estudio escuchaban la que les complacía, sus venas y arterias se dilataban un 26%, lo que en términos médicos se considera una respuesta muy saludable. Si bien los expertos insisten que no puede considerarse como tratamiento para enfermedades de este tipo, sí que indican que puede constituir otra estrategia preventiva fácilmente incorporable en las costumbres cotidianas.
Los mismos investigadores explicaban en otro estudio parecido que escuchar 30 minutos diarios no solo sirve como relajante mental, sino que tiene otros beneficios que se extienden al resto del organismo. La clave no está tanto en el tipo de música, sino en el volumen, el ritmo y en el hecho de que sea la preferida del oyente. Aunque los efectos en la corriente sanguínea duran unos segundos, la acumulación de beneficios perdura y son muy positivos en todas las edades.
Como terapia
Pero la música no sólo interviene en el bienestar del organismo. También desarrolla la capacidad de atención y favorece la imaginación y la capacidad creadora, estimula la habilidad de concentración y la memoria a corto y largo plazo, y desarrolla el sentido del orden y el análisis, facilita el aprendizaje y ejercita la inteligencia.
Las mismas áreas del cerebro implicadas en la percepción musical intervienen también en el lenguaje y en tareas de lectura. De la misma manera, la instrucción musical, según los científicos, induce una mayor sensibilidad a las emociones.
La música como terapia se utiliza en el tratamiento de dolencias como la hipertensión arterial, estados de ansiedad, depresión y estrés, y alteraciones del sueño. También se emplea en la rehabilitación de trastornos psicóticos, autismo y de adolescentes con trastornos del comportamiento. Como su escucha interviene en la producción o inhibición de neurotransmisores en el organismo, a través de ella, se intenta provocar reacciones químicas que mejoren, aceleren o favorezcan el aprendizaje.
Desde el nacimiento
Educar en la música desde la niñez es importante para que los más pequeños puedan sacar provecho de todos sus beneficios fisiológicos y psicológicos. No solo desarrollarán su sensibilidad estética, sino también su emotividad. Lo cierto es que hay una relación directa entre lo que uno escucha y cómo piensa o actúa. También es importante cómo se escucha la música, es decir, un volumen más o menos alto, el ritmo o la velocidad, las intensidades, la cantidad de tiempo, el contenido de las letras de las canciones o el tipo de baile asociado a cada canción.
Todos estos elementos constituyen diversas formas y hábitos sociales que influirán en la manera de ser del niño e, incluso, en su manera de vestir. No obstante, es recomendable hacer un buen uso de todos los elementos. Respecto al volumen, por ejemplo, cuando es demasiado alto puede provocar falta de concentración, alteración el sistema nervioso y alteración de la salud del oído.
Según un método oficial estadounidense, el método Tomatis, la educación musical y del oído puede iniciarse en el útero materno. Alfred Tomatis era un otorrinolaringólogo francés que reveló a mediados del siglo pasado que el embrión codifica las vibraciones. Este descubrimiento fue el inicio la audiopsicofonología. Según esta teoría, es aconsejable que las embarazadas canten (aunque desafinen), porque la voz, vía columna vertebral y filtración por parte del líquido amniótico, llega al embrión. Éste escucha y percibe el sonido a través de un "preoído" que se desarrolla a partir de las tres semanas de gestación.
La música, por tanto, puede activar la escucha ya en el embrión, fundamental para todas las etapas de la vida, según Tomatis. Tan importante es la escucha que si no funciona el sentido del oído se pueden producir graves problemas de aprendizaje y del habla. En resumen, bienestar y salud desde, incluso, antes del nacimiento.
Fuente: NÚRIA LLAVINA RUBIO
http://www.consumer.es/web/es/salud/psicologia/2011/01/24/198449.php
domingo, 24 de abril de 2011
El cuerpo grita... lo que la boca calla
"La enfermedad es un conflicto entre la personalidad y el alma".
Bach.
Muchas veces...
El resfrío "chorrea" cuando el cuerpo no llora.
El dolor de garganta "tapona" cuando no es posible comunicar las aflicciones.
El estómago arde cuando las rabias no consiguen salir.
La diabetes invade cuando la soledad duele.
El cuerpo engorda cuando la insatisfacción aprieta.
El dolor de cabeza deprime cuando las dudas aumentan.
El corazón afloja cuando el sentido de la vida parece terminar.
La alergia aparece cuando el perfeccionismo está intolerable.
Las uñas se quiebran cuando las defensas están amenazadas.
El pecho aprieta cuando el orgullo esclaviza.
La presión sube cuando el miedo aprisiona.
Las neurosis paralizan cuando el niño interior tiraniza.
La fiebre calienta cuando las defensas explotan las fronteras de la inmunidad.
Las rodillas duelen cuando tu orgullo no se doblega.
El cáncer mata cuando te cansas de "vivir".
Y tus dolores callados? Cómo hablan en tu cuerpo?
La Enfermedad no es mala, te avisa que te estas equivocando de camino.
Nelson Torres, Doctor en Psiquiatría (UCV) y experto en Psico-neuro-inmunolingüistica PNIL en Venezuela.
Bach.
Muchas veces...
El resfrío "chorrea" cuando el cuerpo no llora.
El dolor de garganta "tapona" cuando no es posible comunicar las aflicciones.
El estómago arde cuando las rabias no consiguen salir.
La diabetes invade cuando la soledad duele.
El cuerpo engorda cuando la insatisfacción aprieta.
El dolor de cabeza deprime cuando las dudas aumentan.
El corazón afloja cuando el sentido de la vida parece terminar.
La alergia aparece cuando el perfeccionismo está intolerable.
Las uñas se quiebran cuando las defensas están amenazadas.
El pecho aprieta cuando el orgullo esclaviza.
La presión sube cuando el miedo aprisiona.
Las neurosis paralizan cuando el niño interior tiraniza.
La fiebre calienta cuando las defensas explotan las fronteras de la inmunidad.
Las rodillas duelen cuando tu orgullo no se doblega.
El cáncer mata cuando te cansas de "vivir".
Y tus dolores callados? Cómo hablan en tu cuerpo?
La Enfermedad no es mala, te avisa que te estas equivocando de camino.
Nelson Torres, Doctor en Psiquiatría (UCV) y experto en Psico-neuro-inmunolingüistica PNIL en Venezuela.
domingo, 27 de marzo de 2011
El hombre y el agua
Si el hombre es un gesto
el agua es la historia.
Si el hombre es un sueño
el agua es el rumbo.
Si el hombre es un pueblo
el agua es el mundo.
Si el hombre es recuerdo
el agua es memoria.
Si el hombre está vivo
el agua es la vida.
Si el hombre es un niño
el agua es París.
Si el hombre la pisa
el agua salpica.
Cuídala
como cuida ella de ti.
Brinca, moja, vuela, lava,
agua que vienes y vas.
Río, espuma, lluvia, niebla,
nube, fuente, hielo, mar.
Agua, barro en el camino,
agua que esculpes paisajes,
agua que mueves molinos.
¡Ay agua!, que me da sed nombrarte,
agua que le puedes al fuego,
agua que agujereas la piedra,
agua que estás en los cielos
como en la tierra.
Brinca, moja, vuela, lava,
agua que vienes y vas.
Río, espuma, lluvia, niebla,
nube, fuente, hielo, mar...
Joan Manuel Serrat
el agua es la historia.
Si el hombre es un sueño
el agua es el rumbo.
Si el hombre es un pueblo
el agua es el mundo.
Si el hombre es recuerdo
el agua es memoria.
Si el hombre está vivo
el agua es la vida.
Si el hombre es un niño
el agua es París.
Si el hombre la pisa
el agua salpica.
Cuídala
como cuida ella de ti.
Brinca, moja, vuela, lava,
agua que vienes y vas.
Río, espuma, lluvia, niebla,
nube, fuente, hielo, mar.
Agua, barro en el camino,
agua que esculpes paisajes,
agua que mueves molinos.
¡Ay agua!, que me da sed nombrarte,
agua que le puedes al fuego,
agua que agujereas la piedra,
agua que estás en los cielos
como en la tierra.
Brinca, moja, vuela, lava,
agua que vienes y vas.
Río, espuma, lluvia, niebla,
nube, fuente, hielo, mar...
Joan Manuel Serrat
lunes, 7 de marzo de 2011
Detrás, está la gente
Detrás de los héroes y de los titanes,
detrás de las gestas de la humanidad
y de las medallas de los generales.
Detrás de la estatua de la libertad.
Detrás de los himnos y de las banderas.
Detrás de la hoguera de la inquisición.
Detrás de las cifras y de los rascacielos.
Detrás de los anuncios de neón.
Detrás, está la gente
con sus pequeños temas,
sus pequeños problemas,
sus pequeños amores.
Con sus pequeños sueldos,
sus pequeñas campañas,
sus pequeñas hazañas
y sus pequeños errores.
Detrás del Quijote y de Corin Tellado,
de Miss Universo y del Escorial.
Detrás de Hiroshima y del Vaticano,
detrás de la víctima y del criminal.
Detrás de la mafia y de la policía,
detrás del Mesías y de Wall Street.
Detrás del Columbia y de la heroína,
detrás de Goliat y de David.
Cada uno a su manera,
cada quien con sus modos;
detrás estamos todos,
usted, yo y el de enfrente.
Detrás de cada fecha,
detrás de cada cosa,
con su espina y su rosa,
detrás, está la gente.
Joan Manuel Serrat
detrás de las gestas de la humanidad
y de las medallas de los generales.
Detrás de la estatua de la libertad.
Detrás de los himnos y de las banderas.
Detrás de la hoguera de la inquisición.
Detrás de las cifras y de los rascacielos.
Detrás de los anuncios de neón.
Detrás, está la gente
con sus pequeños temas,
sus pequeños problemas,
sus pequeños amores.
Con sus pequeños sueldos,
sus pequeñas campañas,
sus pequeñas hazañas
y sus pequeños errores.
Detrás del Quijote y de Corin Tellado,
de Miss Universo y del Escorial.
Detrás de Hiroshima y del Vaticano,
detrás de la víctima y del criminal.
Detrás de la mafia y de la policía,
detrás del Mesías y de Wall Street.
Detrás del Columbia y de la heroína,
detrás de Goliat y de David.
Cada uno a su manera,
cada quien con sus modos;
detrás estamos todos,
usted, yo y el de enfrente.
Detrás de cada fecha,
detrás de cada cosa,
con su espina y su rosa,
detrás, está la gente.
Joan Manuel Serrat
sábado, 5 de marzo de 2011
Una sonrisa
Una sonrisa no cuesta nada y produce mucho.
Enriquece a quien la recibe, sin empobrecer a quien la da.
Dura tan sólo un instante, pero su recuerdo es a veces eterno.
Nadie es demasiado rico o demasiado poderoso para poder prescindir de ella, ni nadie es demasiado pobre para no merecerla.
Una sonrisa da felicidad en el hogar, apoyo en el trabajo y es el símbolo de la amistad.
Una sonrisa da reposo al cansado y anima a los más deprimidos, reconforta a los desanimados y es el mejor antídoto contra los problemas.
No puede comprarse, prestarse, ni robarse, pues es algo que no tiene ningún valor, hasta el momento en que se da.
Y si alguna vez te tropiezas con alguien que esté demasiado cansado para dar una sonrisa, sé generoso y dale la tuya.
Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa como el que no se la puede dar a los demás.
Anónimo.
Enriquece a quien la recibe, sin empobrecer a quien la da.
Dura tan sólo un instante, pero su recuerdo es a veces eterno.
Nadie es demasiado rico o demasiado poderoso para poder prescindir de ella, ni nadie es demasiado pobre para no merecerla.
Una sonrisa da felicidad en el hogar, apoyo en el trabajo y es el símbolo de la amistad.
Una sonrisa da reposo al cansado y anima a los más deprimidos, reconforta a los desanimados y es el mejor antídoto contra los problemas.
No puede comprarse, prestarse, ni robarse, pues es algo que no tiene ningún valor, hasta el momento en que se da.
Y si alguna vez te tropiezas con alguien que esté demasiado cansado para dar una sonrisa, sé generoso y dale la tuya.
Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa como el que no se la puede dar a los demás.
Anónimo.
El miedo. Una emoción primitiva en el presente.
El miedo es un sentimiento que se manifiesta por algo real o aparente.
Esta emoción primitiva que ha sido ferozmente exacerbada en la actualidad, se manifiesta de múltiples formas.
Se instala en las personas y puede mostrarse individual o en el colectivo social, generando grupos de seres con un miedo similar.
Esta sensación desagradable, llamada miedo, que deviene del hombre primitivo, proviene de los sentimientos de amenazas y riesgos que hoy pueden estar enclavados en nuestras mentes en el presente, en el pasado o también en el futuro.
Es por esto que podemos sentir miedo por algo que ya pasó, una huella en la memoria mantiene iluminada la situación pasada sin dejarla libre en el presente.
Hay un miedo a lo que vendrá por el solo desconocimiento del inexistente mañana.
Por último, el miedo instalado en el presente, es una forma de adaptación, y constituye un mecanismo de conservación y defensa, aparecido para permitir al individuo responder ante situaciones adversas con urgencia y capacidad.
Las distintas alternativas en que se puede presentar el miedo, hacen que en algunos casos nos paralice, en otros salgamos corriendo y por último, retrocedamos.
Me gustaría entonces presentar desde otro lugar, los tres tipos de miedo que puedo percibir.
Hay un miedo que se instala adelante. No me deja ver más allá del miedo. Interrumpe mi andar y obstaculiza cualquier imagen que estuviera por detrás del miedo.
Hay un segundo miedo que se pone por detrás. Lo siento amenazante y desconocido. Me hace realizar pasos sin desearlo y avanzar sin sentido. Es un miedo que empuja y a cada paso mío, avanza por mi espalda.
El tercer miedo, está ubicado a mi lado. Camina a mi paso y se detiene para resguardarme. Por ejemplo el miedo que me anuncia que la plaza está totalmente oscura, parece algo extraño y me dice: algo pasa. Me aconseja suavemente y deja que la emoción no invada.
Estos tres miedos, son el mismo miedo. Dependiendo de cómo me vaya poniendo lo tendré de frente, ocultándome el camino; por detrás empujando mi destino o de lado para acompañar mi presente.
Alejandro Lemos
Esta emoción primitiva que ha sido ferozmente exacerbada en la actualidad, se manifiesta de múltiples formas.
Se instala en las personas y puede mostrarse individual o en el colectivo social, generando grupos de seres con un miedo similar.
Esta sensación desagradable, llamada miedo, que deviene del hombre primitivo, proviene de los sentimientos de amenazas y riesgos que hoy pueden estar enclavados en nuestras mentes en el presente, en el pasado o también en el futuro.
Es por esto que podemos sentir miedo por algo que ya pasó, una huella en la memoria mantiene iluminada la situación pasada sin dejarla libre en el presente.
Hay un miedo a lo que vendrá por el solo desconocimiento del inexistente mañana.
Por último, el miedo instalado en el presente, es una forma de adaptación, y constituye un mecanismo de conservación y defensa, aparecido para permitir al individuo responder ante situaciones adversas con urgencia y capacidad.
Las distintas alternativas en que se puede presentar el miedo, hacen que en algunos casos nos paralice, en otros salgamos corriendo y por último, retrocedamos.
Me gustaría entonces presentar desde otro lugar, los tres tipos de miedo que puedo percibir.
Hay un miedo que se instala adelante. No me deja ver más allá del miedo. Interrumpe mi andar y obstaculiza cualquier imagen que estuviera por detrás del miedo.
Hay un segundo miedo que se pone por detrás. Lo siento amenazante y desconocido. Me hace realizar pasos sin desearlo y avanzar sin sentido. Es un miedo que empuja y a cada paso mío, avanza por mi espalda.
El tercer miedo, está ubicado a mi lado. Camina a mi paso y se detiene para resguardarme. Por ejemplo el miedo que me anuncia que la plaza está totalmente oscura, parece algo extraño y me dice: algo pasa. Me aconseja suavemente y deja que la emoción no invada.
Estos tres miedos, son el mismo miedo. Dependiendo de cómo me vaya poniendo lo tendré de frente, ocultándome el camino; por detrás empujando mi destino o de lado para acompañar mi presente.
Alejandro Lemos
domingo, 6 de febrero de 2011
Orientación vocacional
Es la tarea que realiza en este caso un counselor, cuyo destino son las personas que enfrentan en determinado momento de su vida la posibilidad y necesidad de tomar decisiones, haciendo de la elección un momento crítico, ya que de ésta va a depender el desarrollo posterior.
Es un campo de trabajo preventivo, que atiende a púberes, adolescentes, adultos y gerontes con conflictos o dudas para elegir estudios u ocupaciones, con deseo de cambiar los mismos o con situaciones de fracaso en decisiones ya tomadas. Incluirá aspectos vocacionales (inclinaciones y preferencias personales) y también ocupaciones laborales en actividades productivas. La relación que se establece es simétrica.
Dice Carl Rogers: “Ayudar a los alumnos a convertirse en individuos que sean capaces de tener iniciativas propias para la acción y de una elección y autodirección inteligentes, que fundamentalmente sean capaces de adaptarse flexible e inteligentemente a situaciones problemáticas nuevas”.
Finalidad: acompañar en la elección de una carrera y un trabajo a un joven, que pueda hacerse cargo de la situación que enfrenta, la comprenda y pueda tomar una decisión personal responsable, esto acotado en un espacio de tiempo y con pautas de trabajo preestablecidas que surgen del contacto con cada consultante.
Este proceso puede estar
• Incluido dentro de otro proceso más amplio
• Para resolver esta situación puntualmente
• Trabajado dentro de una institución educativa o similar
La vocación no es innata, sino que se va construyendo a lo largo de la vida. Los contextos que más influyen e interesan son el familiar, educativo y de producción.
La identidad ocupacional se gesta sobre la base de relaciones que establecemos con los otros:
• Nunca gozan de neutralidad afectiva. Las relaciones pueden ser gratificantes o frustrantes.
• Identificaciones con el grupo familiar: actúan en forma positiva o no.
• Con el grupo de pares: tiene influencia (seguir juntos).
• Identificaciones sexuales: profesiones femeninas o masculinas. Quién ser y quién no ser.
Apuntamos a que el adolescente realice una elección madura, que elabora los conflictos y no los niegue. Que pueda identificarse con sus propios gustos, intereses, aspiraciones, motivaciones, e identificar en el mundo externo las profesiones u ocupaciones que se relacionan con lo anterior.
Counselor Marcela A. Darricarrére
Es un campo de trabajo preventivo, que atiende a púberes, adolescentes, adultos y gerontes con conflictos o dudas para elegir estudios u ocupaciones, con deseo de cambiar los mismos o con situaciones de fracaso en decisiones ya tomadas. Incluirá aspectos vocacionales (inclinaciones y preferencias personales) y también ocupaciones laborales en actividades productivas. La relación que se establece es simétrica.
Dice Carl Rogers: “Ayudar a los alumnos a convertirse en individuos que sean capaces de tener iniciativas propias para la acción y de una elección y autodirección inteligentes, que fundamentalmente sean capaces de adaptarse flexible e inteligentemente a situaciones problemáticas nuevas”.
Finalidad: acompañar en la elección de una carrera y un trabajo a un joven, que pueda hacerse cargo de la situación que enfrenta, la comprenda y pueda tomar una decisión personal responsable, esto acotado en un espacio de tiempo y con pautas de trabajo preestablecidas que surgen del contacto con cada consultante.
Este proceso puede estar
• Incluido dentro de otro proceso más amplio
• Para resolver esta situación puntualmente
• Trabajado dentro de una institución educativa o similar
La vocación no es innata, sino que se va construyendo a lo largo de la vida. Los contextos que más influyen e interesan son el familiar, educativo y de producción.
La identidad ocupacional se gesta sobre la base de relaciones que establecemos con los otros:
• Nunca gozan de neutralidad afectiva. Las relaciones pueden ser gratificantes o frustrantes.
• Identificaciones con el grupo familiar: actúan en forma positiva o no.
• Con el grupo de pares: tiene influencia (seguir juntos).
• Identificaciones sexuales: profesiones femeninas o masculinas. Quién ser y quién no ser.
Apuntamos a que el adolescente realice una elección madura, que elabora los conflictos y no los niegue. Que pueda identificarse con sus propios gustos, intereses, aspiraciones, motivaciones, e identificar en el mundo externo las profesiones u ocupaciones que se relacionan con lo anterior.
Counselor Marcela A. Darricarrére
El teatro como un proceso
En primer lugar, tengamos en cuenta algunas características típicas que generalmente definen la conducta del individuo:
1- Sedentarismo.
2- Tendencia a reducir al mínimo el movimiento corporal.
3- La creencia de que su cuerpo es una gran carga.
4- Temor al ridículo.
5- Pánico a la exposición.
6- Un gran desconocimiento de su potencial, tanto físico como intelectual.
7- El desconocimiento de la posibilidad de explotar ese maravilloso mundo interior, desarrollado a través de años de conducta introvertida.
8- Como un gran velo que no deja ver lo descripto en 6 y 7, un tema clave: la baja autoestima.
Ahora analicemos los objetivos de un taller de teatro, más allá del arte:
1- El conocimiento por parte del alumno, de la existencia de su cuerpo como "instrumento".
2- Que ese instrumento, con las limitaciones del caso, PUEDE expresarse.
3- Poder manejar la respiración, la concentración, la relajación, los reflejos.
4- El trabajo y la toma de conciencia sobre la existencia de las partes que componen ese instrumento, como ser los órganos, las articulaciones, las extremidades, los sentidos. Y que están vivas, que sólo necesitan despertar.
5- Lograr (no con exigencias de tiempo ni esfuerzo, sino con paciencia, tolerancia por los tiempos internos de cada uno, y una buena dosis de motivación) transformar ese instrumento sedentario, en el vehículo que exprese arte y el talento escondido.
6- El descubrimiento, a cualquier edad, de la posibilidad de entregarse a una actividad lúdica. Que, aún adultos podemos jugar. Actuar en inglés se dice "to play".
Adelantos observados con los sucesivos grupos de trabajo:
Paulatinamente los alumnos van cobrando confianza en sus propias posibilidades de expresión. Las personas van recuperando la autoestima, al comprobar que están haciendo algo digno, algo valioso. Que se están regalando ese disfrute. Esta actividad se convierte en una excelente motivación, ya que cada uno, además de entusiasmarse con la idea de desarrollar una buena actuación, quieren verse "dignos" sobre el escenario. Y gente que en un principio se desenvolvía con pudor, terminó haciendo personajes del grotesco, clown, además de coreografías bailadas.
En resumen, un taller de teatro, puede convertirse en un proceso significativo, facilitador, estimulante.
Clor. Pablo Lichtin
Actor, director, autor
y docente de teatro.
1- Sedentarismo.
2- Tendencia a reducir al mínimo el movimiento corporal.
3- La creencia de que su cuerpo es una gran carga.
4- Temor al ridículo.
5- Pánico a la exposición.
6- Un gran desconocimiento de su potencial, tanto físico como intelectual.
7- El desconocimiento de la posibilidad de explotar ese maravilloso mundo interior, desarrollado a través de años de conducta introvertida.
8- Como un gran velo que no deja ver lo descripto en 6 y 7, un tema clave: la baja autoestima.
Ahora analicemos los objetivos de un taller de teatro, más allá del arte:
1- El conocimiento por parte del alumno, de la existencia de su cuerpo como "instrumento".
2- Que ese instrumento, con las limitaciones del caso, PUEDE expresarse.
3- Poder manejar la respiración, la concentración, la relajación, los reflejos.
4- El trabajo y la toma de conciencia sobre la existencia de las partes que componen ese instrumento, como ser los órganos, las articulaciones, las extremidades, los sentidos. Y que están vivas, que sólo necesitan despertar.
5- Lograr (no con exigencias de tiempo ni esfuerzo, sino con paciencia, tolerancia por los tiempos internos de cada uno, y una buena dosis de motivación) transformar ese instrumento sedentario, en el vehículo que exprese arte y el talento escondido.
6- El descubrimiento, a cualquier edad, de la posibilidad de entregarse a una actividad lúdica. Que, aún adultos podemos jugar. Actuar en inglés se dice "to play".
Adelantos observados con los sucesivos grupos de trabajo:
Paulatinamente los alumnos van cobrando confianza en sus propias posibilidades de expresión. Las personas van recuperando la autoestima, al comprobar que están haciendo algo digno, algo valioso. Que se están regalando ese disfrute. Esta actividad se convierte en una excelente motivación, ya que cada uno, además de entusiasmarse con la idea de desarrollar una buena actuación, quieren verse "dignos" sobre el escenario. Y gente que en un principio se desenvolvía con pudor, terminó haciendo personajes del grotesco, clown, además de coreografías bailadas.
En resumen, un taller de teatro, puede convertirse en un proceso significativo, facilitador, estimulante.
Clor. Pablo Lichtin
Actor, director, autor
y docente de teatro.
sábado, 5 de febrero de 2011
El alcoholismo
Es una enfermedad caracterizada por la dependencia y la pérdida de control sobre el consumo de alcohol. Tiene como consecuencias visibles perturbaciones en la salud física y mental, y en las relaciones interpersonales.
Es considerado una adicción. Está caracterizado por el abuso y la dependencia psicológica y física de la sustancia. El alcoholismo es un trastorno caracterizado por una búsqueda anormal, persistente y progresiva de alcohol que, con el tiempo, da por resultado la pérdida de control sobre el beber, la reducción del interés por otras actividades que no están vinculadas con el beber, y el desarrollo de tolerancia y dependencia física.
Hijos de padres alcohólicos:
• Tratan de ocultar el problema de sus progenitores por la imagen de la familia.
• Con frecuencia ocultan sus sentimientos.
• Se vuelven más desconfiados con respecto a los demás.
• Actúan como padres de sus propios padres.
• Se vuelven altamente perfeccionistas.
• Tratan de complacer a los demás para sentirse aceptados.
• Necesitan llamar la atención.
El riesgo de tener problemas con el alcohol es tres veces mayor que en los demás hijos.
Tienen mayor tendencia a desarrollar otras conductas adictivas que los demás hijos.
En ellos el síndrome del niño hiperactivo es mucho más frecuente que en los hijos de padres no alcohólicos. Hiperactividad, impulsividad y dificultades en la atención y concentración.
El alcoholismo en la mujer:
Como el organismo en la mujer tiene mayor porcentaje de grasa que de agua, el alcohol se concentra más y lo efectos son más fuertes que en los hombres.
El 40% de las mujeres alcohólicas combina el alcohol con el abuso de tranquilizantes o anfetaminas. Entre las mujeres alcohólicas es más alta la incidencia de suicidios.
Alcohol y embarazo:
El beber durante el embarazo puede causar en el feto una serie de trastornos denominados síndrome alcohólico fetal (SAF).
El alcohol que ingiere la embarazada atraviesa la barrera placentaria y llega hasta el feto, produciéndole una intoxicación que puede dejar secuelas.
Alcohol y adolescencia:
Adolescencia: período con profundos cambios psicológicos, físicos y sociales.
Se comienza a tomar alcohol socialmente, pudiendo generarse una adicción.
El consumo de alcohol es un riesgo para los jóvenes poque:
• Efectos influyen en procesos de cambios físicos y psicológicos, con graves consecuencias.
• Aumenta la tendencia a la exposición a situaciones peligrosas.
• Aumenta el número de accidentes fatales.
• Los adolescentes tienen menor tolerancia que los adultos a los efectos del alcohol.
• Se vuelven adictos con mayor facilidad que los adultos.
Las causas del consumo se deben en gran parte a la influencia familiar, a la de su grupo de amigos y a la de los medios de comunicación.
El alcohol, además de ser una droga, abre las puertas al consumo de otras.
Alcohol y trabajo:
Tanto para la empresa como para el mismo trabajador, el consumo de alcohol puede producir serios inconvenientes. En nuestro país, más del 50% de las personas con problemas de alcoholismo, son trabajadores asalariados. Se duplican los accidentes de trabajo.
Faltan al trabajo dos veces y media más que los que no son alcohólicos.
El alcoholismo no respeta jerarquías.
Alcohol y tránsito:
Si bebe, no maneje. Si maneja, no beba. Es mejor un amigo enojado que un amigo muerto.
El 60% de los accidentes fatales de tránsito se debe a que por lo menos uno de los involucrados
ha consumido alcohol.
Al consumir alcohol, la reacción de todas las funciones que dependen del sistema nervioso
central se hace más lenta. Empeora el juicio y el razonamiento, se altera la coordinación de movimientos reflejos, disminuye la agudeza visual (visión en túnel) y luego aparece la diplopía (visión doble).
El primer paso para solucionar un problema, es reconocer que existe.
De "Beber o no beber, esa es la cuestión", de Cormillot y Lombardini.
El duelo. Conceptualización y tratamiento.
Existe una tendencia en los seres humanos a establecer fuertes lazos emocionales con otras personas, y fuertes reacciones emocionales que se producen cuando dichos lazos se ven amenazados o se rompen. Estos apegos provienen de la necesidad que tenemos de protección y seguridad.
En cualquier sociedad estudiada, ante la pérdida de seres amados, se produce un intento casi universal por recuperar el objeto perdido. Además existe la creencia de una vida después de la muerte, donde uno se puede volver a reunir con el ser querido.
El duelo es una enfermedad? El duelo representa una desviación del estado de salud y bienestar, y es necesario un período de tiempo, para que la persona en duelo vuelva a un estado de equilibrio.
Es necesario elaborar el duelo.
Después de sufrir una pérdida, hay ciertas tareas a realizar para restablecer el equilibrio:
* Aceptar la realidad de la pérdida: Afrontar plenamente la realidad de que la persona se ha marchado y no volverá.
* Trabajar las emociones y el dolor de la pérdida: Dolor físico y dolor emocional y conductual asociado con la pérdida. Trabajar la negación, para no arrastrar el dolor a lo largo de la vida.
* Adaptarse a un medio en el que el fallecido está ausente: Esto dependerá de cómo era la relación con el fallecido y de los distintos roles que desempeñaba. Muchos se resienten por tener que desarrollar nuevas habilidades y asumir roles que antes desempeñaba el otro.
* Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo: Una persona en duelo nunca olvida del todo al fallecido. No se trata de "renunciar" al cónyuge fallecido, sino de ir encontrando un lugar adecuado para él en su vida emocional, un lugar que le permita continuar viviendo de manera eficaz en el mundo.
Cuándo se acaba el duelo?
* Cuando la persona es capaz de pensar en el fallecido sin dolor.
* Cuando puede volver a invertir sus emociones en la vida y en los vivos.
* Cuando recupera el interés por la vida, cuando se siente más esperanzada, cuando experimenta gratificación de nuevo y se adapta a nuevos roles.
Clr. Belén González
viernes, 4 de febrero de 2011
El enojo
El enojo es, en esencia, un remanente de energía que está destinado a aumentar nuestros recursos para resolver el problema que nos produce ese enojo. Sin embargo, al no saber cómo canalizarlo, termina convirtiéndose en un factor que daña aún más la situación a que nos enfrentamos.
La forma de resolver el enojo no nos ha sido enseñada. Sólo sabemos hacer el tipo de descarga que aprendimos en nuestra familia. Cómo es mi forma de descargar el enojo?
El enojo no es un fin en sí mismo, sino un medio para resolver un problema.
Cuál es la causa de mi enojo? Cómo y cuánto me enojo? De qué manera y con qué grado de intensidad lo expreso?
Es de fundamental importancia conocer de qué está hecha esta emoción y aprender a transformar el enojo que destruye, en enojo que resuelve.
Extraido de "La sabiduría de las emociones", de Norberto Levy.
La forma de resolver el enojo no nos ha sido enseñada. Sólo sabemos hacer el tipo de descarga que aprendimos en nuestra familia. Cómo es mi forma de descargar el enojo?
El enojo no es un fin en sí mismo, sino un medio para resolver un problema.
Cuál es la causa de mi enojo? Cómo y cuánto me enojo? De qué manera y con qué grado de intensidad lo expreso?
Es de fundamental importancia conocer de qué está hecha esta emoción y aprender a transformar el enojo que destruye, en enojo que resuelve.
Extraido de "La sabiduría de las emociones", de Norberto Levy.
Carl Rogers y la educación
APRENDIZAJE SIGNIFICATIVO Y EDUCACIÓN FORMAL
• Por una parte la función del maestro, no ya como autoridad, sino como facilitador del aprendizaje, debe crear un clima de aceptación en el grupo. Este es más importante que las técnicas que emplea el maestro. Debe ser permisivo y comprensivo y que respete la individualidad. El profesor debe aceptar al grupo y a cada uno de sus miembros como es. No debe de juzgar.
• Por otra parte el enfoque no directivo. No podemos enseñar directamente a otra persona, sólo podemos facilitar su aprendizaje. De este enfoque se deriva el concepto de aprendizaje significativo o vivencias. Rogers parte de la incomunicabilidad o intransferibilidad de los saberes. No podemos comunicar o enseñar a otros nuestros conocimientos. El individuo aprenderá sólo aquello que le sea útil, significativo y esté vinculado con su supervivencia. (Rogers, 1983).
• Avanzando un poco más sobre esta idea, el profesor no podrá determinar con precisión cuáles son los contenidos significativos de cada alumno. Sólo el propio alumno los conocerá. Pero ni siquiera podrán ser planteados por el propio aprendiz, sino que irán surgiendo poco a poco. Si no hay contenidos precisos, no es posible establecer un currículum formal.
• “Hemos descubierto que una cantidad minúscula de estructuración tiene efecto decisivo sobre la naturaleza de la experiencia del grupo en la escuela”. (Rogers, 1977).
• El proceso educativo será necesariamente un proceso individualizado. Por lo tanto, sin contenidos precisos ni válidos generalmente, no hay grados, ni tampoco exámenes, pues… Sobre qué contenidos el profesor podría examinar a un alumno si sólo él sabe lo que le es significativo? Cuáles serán los parámetros para determinar el avance en grado?
jueves, 3 de febrero de 2011
Escuchar... el abrazo hueco
Hablar y escuchar... Todos hablamos, pero... Todos escuchamos?
Es el escuchar, no el hablar, lo que da sentido a lo que decimos. Escuchar es lo que dirige todo el proceso de la comunicación.
Escuchar implica una entrega al otro, una apertura interior para recibir al prójimo, ahuecar el abrazo, correrse, dar lugar, aceptar lo que viene, recibir con amor, tener disposición a hospedar al otro, ser valiente ante realidades diferentes, ser valiente ante verdades que no son las mías.
Todos somos seres humanos, pero todos somos personas únicas, diferentes entre sí, de lo contrario no necesitaríamos escucharnos.
El counselor ofrece su escucha, para que el consultante se sienta valorado, respetado. Para disfrutar con el otro, aprender de él, estar en contacto con su vida y enriquecerse mutuamente.
Hay un mundo distinto detrás de las palabras de cada uno... bienvenido sea.
Clr. Mirta Persini
lunes, 3 de enero de 2011
Nuestra tarea
domingo, 2 de enero de 2011
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